La evaluación de esta materia debe
seguir el mismo carácter abierto y participativo de los criterios de
metodología, y debe realizarse mediante una evaluación continua.
El profesor valorara fundamentalmente
el proceso y lo aprendido a través de sus explicaciones, y sea la adecuación de
los trabajos personales o colectivos al proyecto propuesto.
Esta evaluación deberá ser cualitativa
y cuantitativa.
Durante el primer trimestre se
realizaran cuatro trabajos operativos por parte de cada alumno, que deberán
alcanzar una calificación no menor de cinco. Durante el segundo trimestre se
realizaran otros tres trabajos personales, con el mismo resultado. En el tercer
trimestre, se realizaran dos trabajos, uno personal y otro en grupo reducido,
dándose la particularidad de que en éste último, la evaluación se efectuar entre
los propios integrantes de cada grupo, que tendrá que someter su dictamen a la
aprobación de los miembros de los otros grupos de la clase.
El orden o reparto de los trabajos
durante las evaluaciones podrá variar dependiendo del número de días que corresponda
a cada una en cada año escolar.
Finalmente, el
total de la puntuación conseguida por cada alumno debería ser
de una media igual o superior a cinco,
para considerar superada la materia.
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